Mi casa en el árbol

Nicolás de 5 años, soñaba con tener una casa del árbol con tobogán y césped dentro de su departamento  y… ¿por qué no? Nos pusimos manos a la obra para cumplir su sueño y diseñar un cuarto de juegos de acuerdo a sus expectativas. Una cromática muy vivaz fue el punto de partida, con tonos contrastados entre celeste, verde, negro, blanco y mobiliario de madera clara nos envuelve en un espacio idéntico a un patio de juegos; el mural de montañas nos muestra un horizonte natural y además ¡es una pizarra!

Nico nunca está solo, siempre juega con sus amigos o primos, y este espacio está pensado también en ellos, por lo que colocamos un rollo de papel amplio, una mesa con 3 asientos para compartir horas de actividades creativas. La casa del árbol tiene dos plantas en la que pueden jugar o disfrutar de la lectura; su juguetero además tiene mucha capacidad de almacenamiento. Sin duda, un lugar mágico en medio de la ciudad.

La casa del árbol sin duda es el centro de este espacio, dándole dinamismo con su tobogán y refugio.